La tolerancia frente a la intolerancia es el peor de todos los crímenes. Ni siquiera la intolerancia es tan grave.
Los creyentes de todas las religiones, junto con los hombres de buena voluntad, abandonando cualquier forma de intolerancia y discriminación, están llamados a construir la paz.
La intransigencia no es intransigencia a secas: es 'la santa intransigencia'.
Mucha gente piensa, o por lo menos siente, que el que no tiene sus hábitos y sus entusiasmos es un enemigo. A mí me parece lógica la intransigencia tratándose de ideas esenciales.