Dad al hombre salud y metas a alcanzar y no se detendrá a pensar sobre si es o no feliz
Por primera vez sentía un placer perverso en ser diferente de los demás. Es difícil no creerse superior cuando uno sufre, y el ver gente feliz nos da náuseas.
Donde quiera que veáis la moderación sin tristeza, la concordia sin esclavitud, la abundancia sin profusión, decid confiadamente; es un ser venturoso el que aquí manda.
El hombre venturoso no espera nunca que algo le mude la fortuna