No basta ser bueno: es necesario tambien parecerlo, por acatamiento a la sociedad, por consideración a sí mismo y por respeto a la verdad
Ni el vil acatamiento de la prensa del franquismo se puede comparar con el vasallaje corrupto y de consecuencias tan nefastas para la ciudadanía como el que tienen los medios de comunicación catalanes
Nosotros, los vascos, evitemos el mortal contagio, mantengamos firme la fe de nuestros antepasados y la seria religiosidad que nos distingue, y purifiquemos nuestras costumbres, antes tan sanas y ejemplares, hoy tan infestadas y a punto de corromperse por la influencia de los venidos de fuera.
La religiosidad verdadera exige humildad y modestia
Al hacerle una profunda reverencia a alguien, se le da la espalda a otro.
Teniendo respeto y reverencia por la vida, entramos en una relación espiritual con el mundo.