A veces tenía la sensación de haberse pasado la mayor parte de la vida viajando sin llegar nunca a un sitio que importara. Pero bueno, aquella podía ser una descripción tan buena de la vida como cualquier otra. El único destino real era la muerte, y nuestra vida consistía en encontrar el camino más cómodo y agradable para llegar a ella.
Vic es preciosa, si no fuese por la inmigración que tenemos sería una ciudad mucho más agradable de lo que es ahora, pero tenemos desgracia que la inmensa mayoría de los inmigrantes son musulmanes
Tenga paciencia quien se cree infelice; que aun en la situación más lamentable, es la vida del hombre siempre amable
Qué agradable es poder confesar sus intimidades en público, ¿No le parece, caballero? ¿Hay muchos en mi lugar que pueden sentarse impunemente- te a la mesa de un café y entablar una amable conversación con un desconocido como lo hago yo? No. Y, ¿Por qué no hay muchos, puede contestarme? No sé...Porque mi semblante respira la santa honradez.