La necesidad, al menesteroso le obliga al ser mentiroso.
Es preciso fijar perspectivas en las que el mundo aparezca trastrocado, enajenado, mostrando sus grietas y desgarros, menesteroso y deforme en el grado en que aparece bajo la luz mesiánica. Situarse en tales perspectivas sin arbitrariedad ni violencia, desde el contacto con los objetos, sólo le es dado al pensamiento.
Muchos han argumentado que el vacío no existe, otros afirman que sólo existe con dificultad a pesar del rechazo de la naturaleza; No conozco a nadie que afirme que existe fácilmente sin ninguna resistencia por parte de la naturaleza.
Esta es mi vida, un oscuro trabajo, un intenso anhelar, las rosas de mi patio y mi vacío hogar.