Aposentad con firmeza la razón en su asiento, y convocad ante su tribunal cada hecho, cada opinión. Cuestionad con audacia incluso la existencia de Dios, porque si hubiera uno, ha de aprobar más el homenaje a la razón que al miedo ciego.
Fallar en conocer la situación de los adversarios por economizar en aprobar gastos para investigar y estudiar a la oposición es extremadamente inhumano, y no es típico de un buen jefe militar, de un consejero de gobierno, ni de un gobernante victorioso.
Los únicos brazos entre los cuales nos resignaríamos a pasar la vida son los brazos de las Venus que han perdido los brazos.
Busca el lado positivo y agradable, aun de las situaciones más complicadas y dolorosas. Es una disciplina que te ayudará a pasar más fácilmente los momentos difíciles, y a convertir los problemas en oportunidades
Tritogenia: sabiduría; y es que son tres las consecuencias que se derivan de tener buen juicio: calcular bien, hablar bien y actuar como es debido.
Es terrible hablar bien cuando se está errado.