Los sumisos, los mansos, los indiferentes, los sufridos, los resignados, son la masa, la muchedumbre que con su pasividad, su modorra y falta de carácter hace lento y doloroso el avance de las sociedades.
La verdadera amistad es planta de lento crecimiento que debe sufrir y vencer los embates del infortunio antes de que sus frutos lleguen a completa madurez.
Un espíritu reflexivo tiene que saber a qué atenerse para sentirse reconciliado consigo mismo. Los asuntos del mundo apenas se regulan por esta clase de razonamientos; pero los hombres rigurosos quieren llevar a estos temas alguna lógica y desenmarañar las confusiones donde se enredan los espíritus superficiales
La verdadera educación no sólo consiste en enseñar a pensar sino también en aprender a pensar sobre lo que se piensa y este momento reflexivo -el que con mayor nitidez marca nuestro salto evolutivo respecto a otras especies- exige constatar nuestra pertenencia a una comunidad de criaturas pensantes.
El mercado de valores ha previsto nueve de las últimas cinco recesiones
El sistema no ha previsto esta pequeña molestia: lo que sobra es gente. (...) El sistema vomita hombres. Las misiones norteamericanas en América Latina esterilizan masivamente mujeres y siembran píldoras, diafragmas, espirales, preservativos y almanaques marcados, pero cosechan niños.