Usted se sorprenderá cuando le diga que en los barrios más pobres de muchas ciudades donde vivimos y trabajamos, al abordar a las personas que viven en casuchas, lo primero que nos piden no es pan ni ropa, pese a que muchas se están muriendo de hambre y andan casi desnudas. Nos piden que les enseñemos la Palabra de Dios. La gente tiene hambre de Dios. Anhela escuchar Su Palabra.
Tengo urgencia de oírte alegría de oírte buena suerte de oírte y temores de oírte, o sea, resumiendo estoy jodido y radiante quizá más lo primero que lo segundo y también viceversa
Los microprocesadores se están metiendo en todo. En un futuro cercano no habrá ningún accesorio -salvo una escoba, acaso- que no tenga un procesador dentro
Quiero que te muestres señor de la Vejez, a la que harás volver frecuentemente la vista atrás y si no ha dejado vestigios dignos la volverás molesta, triste, temerosa del juicio cercano de la próxima estación que la lleva al inexorable tribunal de Radamanto y harás así que sienta los horrores de la muerte antes de que ésta venga.