Yo pensaba que también podía ser heroico escaparse por gusto, sin más, por amor a la libertad y a la alegríano a la alegría impuesta oficial y mesurada, sino a la carcajada y a la canción que brotan de una fuente cuyas aguas nadie canaliza.
La vida de civil resultará increíblemente aburrida. Sin multitudes que te reciban llenas de júbilo, sin flores, sin aviones privados. Estoy convencido de que el mejor final para un oficial es la última bala de la guerra.