La niñez es el corazón de todas las edades.
Cuando la vejez te llega, no es que vuelves a la infancia, es que moderas el paso y al fin la niñez te alcanza
La juventud es la edad de los sacrificios desinteresados, de la ausencia de egoísmo, de los excesos superfluos.
La juventud es la edad del crecimiento y del desarrollo, de la actividad, y de la viveza, de la imaginación y el ímpetu.